7 de mayo de 2021
Hace años Puerto Rico dejó de ser la vitrina de Estados Unidos para América Latina. Más de dos décadas han transcurrido desde el fracaso del intento de continuar presentando nuestro país como una “vitrina de la democracia” para el resto de América Latina. El papel político asignado por Estados Unidos a Puerto Rico poco a poco se fue desplazando, al calor del fin de la llamada Guerra Fría y la reasignaciones de funciones militares al Comando Sur de los Estados Unidos, a la guerra contra el narcotráfico y la llamada emigración ilegal. El remate al modelo colonial y sus supuestas ventajas económicas ante Estados Unidos se vino abajo tras el inicio de los tratados de libre comercio de este país con el resto de América del Norte y su expansión hacia América del Sur y los países de la cuenca del Caribe.